¿Cuándo puede ser conveniente empezar terapia?
Tal vez te hayas hecho esta pregunta en algún momento de tu vida. Después de todo, ¿para quién está indicado un proceso terapéutico? Lo cierto es que si eres un ser humano que tiene emociones, si a diario te enfrentas a problemas nuevos o viejos que en ocasiones no puedes resolver por ti mismo y que te molestan de alguna manera, entonces la terapia puede ser para ti.
Aún existen personas que asocian al psicólog@ con la locura o los trastornos mentales. Y sí, la terapia también está indicada en este tipo de casos. Pero no solo en estos. Hoy más que nunca, con la actual situación de pandemia que atravesamos, nos enfrentamos diariamente a cuestiones emocionales que impactan directamente en nuestras rutinas y calidad de vida. La terapia te puede ayudar en gran medida a entender todo esto y adquirir recursos para afrontar todas las adversidades de una manera mucho mas saludable.
Puede ser un buen momento para iniciar terapia:
Cuando las circunstancias vividas sobrepasan tus recursos personales para afrontarlas. Puede ser útil preguntarte (o revisar) si estás teniendo habilidades de afrontamiento negativas, tales como conductas de "exceso" con el fin de aliviar tu malestar (alcohol u otras sustancias), conductas de evitación o aislamiento.
Cuando tu malestar emocional afecte o interfiera en tus actividades de la vida cotidiana. Aquí puedes preguntarte: estoy mas desatent@?, estoy teniendo control sobre mis horas de descanso?, cómo está siendo mi alimentación en este último tiempo? Con estas preguntas, podrás revisar si hay excesos o falta de.
Cuando presentes síntomas físicos (somatizaciones). Es decir, cuando luego de varios chequeos y estudios médicos, no hay una causa orgánica detectada.
Cuando necesites un espacio para sentirte escuchad@ y expresar tus emociones. Algunas personas no cuentan con redes de apoyo saludables o, en ocasiones, precisan de una mirada externa que brinde una escucha activa, empática y libre de juicios.
Cuando precises orientación o acompañamiento ante una situación puntual. Por ej.: pérdida o duelo de un ser querido, de un trabajo, una pareja, mudanza y/o emigración. Existen ocasiones en las que se hace necesario contar con alguien que guíe para tomar decisiones o bien para saber cómo lidiar con un acontecimiento vivido.
Cuando sientas que llevas algún tiempo con la sensación de "ya no ser la/el mism@ de antes". Para esto, puedes preguntarte: ¿He perdido la motivación en actividades que antes disfrutaba?, ¿Me noto mas irritable/ ansios@/ enojad@/ triste sin saber por qué?
Cuando tengas el deseo de mejorar un área específica de tu vida. Es importante recordar que no necesariamente tienes que estar atravesando un momento crítico. A veces solo basta con tener el genuino interés de conocerte y explorar tu mundo interno, para construir nuevos y mejores recursos para tu crecimiento personal.
Este es un muy breve resumen de los posibles indicadores para tomar en cuenta a la hora de iniciar una terapia. Como siempre digo, se trata de una decisión enteramente personal e intransferible: nadie más lo puede hacer por ti. Así que si luego de leer, consideras que este es tu momento, ¡Te doy la bienvenida para acompañarte en tu proceso!